Termas Romanas de Toledo
Termas Romanas de Toledo
Las termas romanas de Toledo son, junto al circo romano, uno de los mejores testigos que hablan en favor de la bonanza y prosperidad que vivió Toledo en la época romana del Imperio. En el año 1986 se empezaron a encontrar los tesoros que se conservan en este lugar, y que nos dan una clara perspectiva de cuál fue su monumentalidad.
Los restos arqueológicos de las termas romanas se convierten en referentes del tipo de arquitectura e ingeniería aplicadas en cualquier ciudad romana erguida según los modelos urbanísticos entonces imperantes.
Las termas fueron construidas a finales del siglo I o a principios del siglo II d. C. Los baños romanos eran un tipo un club social y lúdico, e incluso tenían una función médica. Lo más interesante de estos lugares es que comúnmente eran los espacios donde los patricios y gente de alta casta cerraba acuerdos políticos o comerciales.
Los materiales
El hormigón de cal es uno de los materiales que más se utilizaba a la hora de construir edificios, así como el uso de arcos formados por dovelas de piedra.
Estas innovaciones de la época romana aparecen bien representadas en las termas romanas de Toledo, puesto que en ellas se puede observar todo un tramo de canalización y una galería abovedada con hormigón de cal, así como también un arco formado por dovelas, que debieron formar parte de un complejo sistema de canalización de agua para abastecer de agua limpia a los baños.
Las estancias
Las termas romanas se suelen distribuir de forma similar, y por norma general, tienen las mismas estancias. En este caso, tenemos evidencias de que había un caldarium: una sala con un sistema de calefacción en el subsuelo (hipocausto), que es lo que caldeaba la estancia y creaba calidez.
Esta misma sala fue creada y decorada con sumo detalle y sin escatimar en gastos: las paredes eran de mármol, hubo una cuidada planificación, y se han encontrado muchos elementos decorativos.
Aparte de las salas calefactadas, se pueden ver otros restos romanos hallados en localizaciones diferentes de la ciudad, y que formarían parte de los sistemas de canalización del agua.
Las termas romanas de Toledo fueron utilizadas hasta el siglo VI. En el año 1500 fueron parcialmente destruidas por los toledanos, quienes utilizaron sus piedras para construir sus propias casas.
Anteriormente, fueron utilizadas y reutilizadas para otros fines, de ahí que, por ejemplo, en ellas podamos encontrar un silo datado entre los siglos XII y XIV, y dos aljibes del siglo XVI.
Basada en una obra en https://fotografiasdetoledo.blogspot.com.es/.
Permisos más allá del alcance de esta licencia pueden estar disponibles en http://www.charlymorlock.com/search/?q=licencia++CC.........................................................
Comentarios
Publicar un comentario